#AhoraMisiones Cuando el presidente de Francia y la primera dama, Brigitte Macron, descendieron del avión que los trajo hasta la Argentina, nadie los esperaba. La vicepresidente apareció minutos después y contó el motivo de la demora.
La llegada del presidente de Francia, Emmanuel Macron, a la Argentina para participar del G20 tuvo una perlita inesperada. Cuando el mandatario y la primera dama bajaron del avión ningún mandatario argentino los estaba esperando.
Desconcertada, la pareja francesa saludó a un operario de pista del Aeropuerto Internacional de Ezeiza y caminó por la alfombra roja hasta el auto oficial que los esperaba para trasladarlos.
El detalle pareció hasta irónico, debido a que Macron viene de enfrentar la protesta “de los chalecos amarillos” en su país, nombre que recibió el grupo que llena las calles francesas de protestas en reclamo del aumento de precios de la nafta.
Cuando Macron y su esposa estaban a punto de subir al vehículo apareció la vicepresidente Gabriela Michetti y su comitiva para darle el recibimiento oficial.
Minutos más tarde, en diálogo con TN Central, Michetti explicó el motivo de la demora. “Pasó algo raro ahí. Nosotros estábamos con una persona de protocolo de cancillería y con el embajador de Francia y el vicecanciller. Nosotros teníamos que esperar que nos dijeran ‘ahora’, estaba todo cronometrado, en teoría. Y cuando nos dijeron ‘ahora’ vamos y cuando llegamos el presidente ya se estaba metiendo en el auto”, contó.
“Me imagino que se deben haber sentido muy raros cuando bajaron y no había nadie”, comentó.
Acerca de la charla que mantuvo con el presidente francés y su mujer, Michetti contó: “Fue bastante simpático y muy descontracturado. Yo lo había visto en la Asamblea General de la ONU y ahí me puse a conversar y cuando me vio se acordó. Fue una linda charla”.
Luego relató que le dio “consejos” al mandatario francés. “Le dije que esta cumbre es para los líderes. Que es muy importante que se concentren en propuestas para este planeta Tierra tan convulsionado. ‘Tomo los consejos’, me dijo”, concluyó.
Fuente: TN
La llegada del presidente de Francia, Emmanuel Macron, a la Argentina para participar del G20 tuvo una perlita inesperada. Cuando el mandatario y la primera dama bajaron del avión ningún mandatario argentino los estaba esperando.
Desconcertada, la pareja francesa saludó a un operario de pista del Aeropuerto Internacional de Ezeiza y caminó por la alfombra roja hasta el auto oficial que los esperaba para trasladarlos.
El detalle pareció hasta irónico, debido a que Macron viene de enfrentar la protesta “de los chalecos amarillos” en su país, nombre que recibió el grupo que llena las calles francesas de protestas en reclamo del aumento de precios de la nafta.
Cuando Macron y su esposa estaban a punto de subir al vehículo apareció la vicepresidente Gabriela Michetti y su comitiva para darle el recibimiento oficial.
Minutos más tarde, en diálogo con TN Central, Michetti explicó el motivo de la demora. “Pasó algo raro ahí. Nosotros estábamos con una persona de protocolo de cancillería y con el embajador de Francia y el vicecanciller. Nosotros teníamos que esperar que nos dijeran ‘ahora’, estaba todo cronometrado, en teoría. Y cuando nos dijeron ‘ahora’ vamos y cuando llegamos el presidente ya se estaba metiendo en el auto”, contó.
“Me imagino que se deben haber sentido muy raros cuando bajaron y no había nadie”, comentó.
Acerca de la charla que mantuvo con el presidente francés y su mujer, Michetti contó: “Fue bastante simpático y muy descontracturado. Yo lo había visto en la Asamblea General de la ONU y ahí me puse a conversar y cuando me vio se acordó. Fue una linda charla”.
Luego relató que le dio “consejos” al mandatario francés. “Le dije que esta cumbre es para los líderes. Que es muy importante que se concentren en propuestas para este planeta Tierra tan convulsionado. ‘Tomo los consejos’, me dijo”, concluyó.
Fuente: TN