Voceros de la Santa Sede informaron a Infobae que el encuentro se había pautado hace más de un mes. Sorpresivamente, el plantel decidió no acudir a la reunión. Hay un fuerte malestar en la cúpula de la Iglesia Argentina
La selección argentina de fútbol desairó al papa Francisco a pocos días del inicio de la Copa del Mundo. Inexplicablemente, el plantel que conduce Jorge Sampaoli se bajó de una visita al Vaticano que había sido programada hace más de un mes, según informaron fuentes oficiales de la Santa Sede a Infobae.
El desplante tuvo un condimento insólito. Esta mañana, el vocero Greg Burke le comunicó a los periodistas acreditados en el Vaticano que mañana a las 15 se realizaría el encuentro entre el Pontífice y la delegación argentina de fútbol que desde la próxima semana representará al país en Rusia. Además, publicó un mensaje en redes sociales para comunicar la novedad.
Hace casi un mes, el 9 de mayo, el propio Pontífice había adelantado ante las cámaras de un canal argentino que recibiría a los jugadores para darles su bendición en la previa del torneo de fútbol más importante del planeta.
En la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) alegaron que no podían asistir a visitar a Francisco por cuestiones logísticas. Recordaron que recientemente decidieron reprogramar y adelantar el viaje a Israel, donde el equipo de Lionel Messi disputará su último amistoso. Sin embargo, pareciera que existen otras razones que terminaron influyendo para que la foto entre el Obispo de Roma y el combinado albiceleste no se concretara.
Es que el desplante cayó como una bomba en la cúpula de la Iglesia Católica Argentina, que había trabajado para gestionar la visita. Dicen que hace un mes que tenían todo acordado y ahora se enteraron que el plantel no quiere ir al Vaticano a través de los periodistas que están en Bracelona, cubriendo los entrenamientos del equipo argentino, y no por un comunicado oficial como correspondería hacer en estas situaciones.
Como corolario, en las próximas horas los futbolistas visitarán el Muro de los Lamentos, en Jerusalén. Si bien en el Episcopado valora la diversidad cultural, esperaban anticiparse y lograr antes la imagen del plantel en la Santa Sede. Este cortocircuito contrasta con lo sucedido en 2013, antes del Mundial de Brasil, cuando el plantel visitó a Francisco e incluso se tomó varias fotografías con el prelado. ¿Qué cambió en 4 años para que ahora no quisieran verlo?
La selección argentina de fútbol desairó al papa Francisco a pocos días del inicio de la Copa del Mundo. Inexplicablemente, el plantel que conduce Jorge Sampaoli se bajó de una visita al Vaticano que había sido programada hace más de un mes, según informaron fuentes oficiales de la Santa Sede a Infobae.
El desplante tuvo un condimento insólito. Esta mañana, el vocero Greg Burke le comunicó a los periodistas acreditados en el Vaticano que mañana a las 15 se realizaría el encuentro entre el Pontífice y la delegación argentina de fútbol que desde la próxima semana representará al país en Rusia. Además, publicó un mensaje en redes sociales para comunicar la novedad.
Hace casi un mes, el 9 de mayo, el propio Pontífice había adelantado ante las cámaras de un canal argentino que recibiría a los jugadores para darles su bendición en la previa del torneo de fútbol más importante del planeta.
En la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) alegaron que no podían asistir a visitar a Francisco por cuestiones logísticas. Recordaron que recientemente decidieron reprogramar y adelantar el viaje a Israel, donde el equipo de Lionel Messi disputará su último amistoso. Sin embargo, pareciera que existen otras razones que terminaron influyendo para que la foto entre el Obispo de Roma y el combinado albiceleste no se concretara.
Es que el desplante cayó como una bomba en la cúpula de la Iglesia Católica Argentina, que había trabajado para gestionar la visita. Dicen que hace un mes que tenían todo acordado y ahora se enteraron que el plantel no quiere ir al Vaticano a través de los periodistas que están en Bracelona, cubriendo los entrenamientos del equipo argentino, y no por un comunicado oficial como correspondería hacer en estas situaciones.
Como corolario, en las próximas horas los futbolistas visitarán el Muro de los Lamentos, en Jerusalén. Si bien en el Episcopado valora la diversidad cultural, esperaban anticiparse y lograr antes la imagen del plantel en la Santa Sede. Este cortocircuito contrasta con lo sucedido en 2013, antes del Mundial de Brasil, cuando el plantel visitó a Francisco e incluso se tomó varias fotografías con el prelado. ¿Qué cambió en 4 años para que ahora no quisieran verlo?