La escribana Adriana García, condenada a perpetua por el asesinato de su marido, el abogado Guillermo Valdez, comenzaría en el mes de julio con salidas transitorias, tras 11 años de estar como reclusa en el penal de Villa Lanús. El crimen, que sacudió a la sociedad posadeña por su alevosía, ocurrió el 19 de junio de 2003.
El abogado fue encontrado a un costado de la avenida Cabo de Hornos con el rostro desfigurado, mutilado. Las lesiones que el abogado presentaba en distintas partes del cuerpo dejaban ver el salvajismo con el que actuaron los homicidas. Valdez fue blanco de varios impactos de bala y luego despellejado.
Con posterioridad, efectivos de la Dirección de Investigaciones fueron deteniendo uno a uno a los supuestos responsables del crimen. Así cayeron Bertoldo Roberto Neumann Rojas, la escribana Adriana García y Jorge Mosquito Ramírez. Los tres fueron procesados por el delito de “homicidio calificado por el vínculo, con ensañamiento y con alevosía”.
De escribana a religiosa
De escribana exitosa, ahora Adriana es una interna de muy buena conducta. Adhirió a la religión evangélica, pasa mucho tiempo leyendo la biblia y realiza, inclusive, estudios bíblicos. Bertoldo Neuman, el otro condenado por el mismo caso, también continúa preso y estudia abogacía.
Presa Vip
En el año 2004 Adriana García estaba ya en el penal de Villa Lanús y junto a una condenada por asesinato, eran a quienes todas las reclusas apuntaban como presas con tratos especiales. Por entonces, la madre de la escribana le llevaba cigarrillos de regalo para los guardias para asegurarse de que su hija tuviera tratos distintos, especiales.
El abogado fue encontrado a un costado de la avenida Cabo de Hornos con el rostro desfigurado, mutilado. Las lesiones que el abogado presentaba en distintas partes del cuerpo dejaban ver el salvajismo con el que actuaron los homicidas. Valdez fue blanco de varios impactos de bala y luego despellejado.
Con posterioridad, efectivos de la Dirección de Investigaciones fueron deteniendo uno a uno a los supuestos responsables del crimen. Así cayeron Bertoldo Roberto Neumann Rojas, la escribana Adriana García y Jorge Mosquito Ramírez. Los tres fueron procesados por el delito de “homicidio calificado por el vínculo, con ensañamiento y con alevosía”.
De escribana a religiosa
De escribana exitosa, ahora Adriana es una interna de muy buena conducta. Adhirió a la religión evangélica, pasa mucho tiempo leyendo la biblia y realiza, inclusive, estudios bíblicos. Bertoldo Neuman, el otro condenado por el mismo caso, también continúa preso y estudia abogacía.
Presa Vip
En el año 2004 Adriana García estaba ya en el penal de Villa Lanús y junto a una condenada por asesinato, eran a quienes todas las reclusas apuntaban como presas con tratos especiales. Por entonces, la madre de la escribana le llevaba cigarrillos de regalo para los guardias para asegurarse de que su hija tuviera tratos distintos, especiales.