Mató a cinco familiares, escapó y es intensamente buscado por la policía. Su imagen ya está en todos los medios y quienes lo identificaron en Facebook no paran de dejarle mensajes de repudio
Diego Alberto Loscalzo tiene 35 años. Oriundo de Martín Coronado, empleado de Metrovías durante los últimos seis años, era conocido en su barrio como el "Chino". Desde anoche, todo cambió: hoy es conocido como el presunto autor de la masacre de Hurlingham.
Se lo acusa de haber asesinado ayer por la noche a su pareja, Romina Maguna, miembro del Comando de Patrullas San Isidro de la Policía Bonaerense y a otros cuatro familiares, incluida su propia cuñada, Gisella Vanesa Maguna, su suegra y un bebé con nueve meses de gestación que tenía fecha para nacer hoy mismo. También hirió gravemente a otros tres familiares de su pareja, entre ellas una niña de 12 años, lo que le aseguró una calificación de tentativa de homicidio.
El desenlace es por lo menos sorprendente: al menos hasta el mes pasado, Loscalzo, con domicilio en la zona de Martín Coronado, se mostraba junto a Maguna y el resto de sus presuntas víctimas en fiestas familiares. Junto a él estaban quienes serían los hijos de la pareja.
Loscalzo, por su parte, estaba asediado por deudas, de acuerdo a información del Banco Central. Había conformado una SRL en junio de 2011 junto a una mujer porteña; la firma estaba dedicada a la vigilancia privada, un rubro en el cual Loscalzo había trabajado en 2005 en una importante empresa. Sus registros de empleo revelan puestos en compañías de limpieza y también previamente en Metrovías, en 2007.
Sin embargo, hoy adeuda más de 200 mil pesos a entidades bancarias y enfrentó dos juicios por cobro ejecutivo en el fuero comercial de San Martín, uno librado por una empresa de préstamos y otro por una cooperativa de crédito para casas.
El estupor por la noticia da paso lentamente a algunas reflexiones en voz alta de sus vecinos; algunos dicen que la pareja tenía una relación normal, pero otros aseguran que tenía un vínculo muy tormentoso con su mujer. Testimonios recogidos por la Bonaerense hablan de un cuadro de violencia constante.
Diego, hermano de Romina Maguna, relató cómo fueron los hechos: "Estaba mi hermana en la habitación con su pareja. A él le agarró la loca, empezaron a discutir y le pegó cuatro disparos en el pecho a ella; cuando bajó la escalera le pegó siete tiros a mi otro hermano. A una amiga de la familia le pegó tres tiros, le rompió el fémur. Después se fue al barrio Luna y mató a mi hermano, y le disparó a mi cuñado y le pegó a la hija de mi cuñado".
La noticia es el tema del día y provocó que cientos de personas se pusieran rastrearan el perfil de Diego Loscalzo en redes sociales. "Prefiero andar con locos que con falsos", dice la imagen que eligió de portada para su cuenta de Facebook, en la que se destaca una figura del Guasón, el popular villano de Batman.
La reacción popular es contundente: en su muro se puede leer una catarata de mensajes cargados de ira contra su persona que se replican sin cesar. Ni siquiera la imagen de la virgen María que usa como foto de perfil generó algún sentimiento de compasión. Mientras tanto, la Policía Bonaerense lo busca intensamente, con actuaciones a cargo de la Comisaría 1° de Hurlingham.
La fiscal Paula Hondeville, a cargo de la UFI N°10 especializada en violencia de género de Morón, es la encargada de investigar el caso.
Diego Alberto Loscalzo tiene 35 años. Oriundo de Martín Coronado, empleado de Metrovías durante los últimos seis años, era conocido en su barrio como el "Chino". Desde anoche, todo cambió: hoy es conocido como el presunto autor de la masacre de Hurlingham.
Se lo acusa de haber asesinado ayer por la noche a su pareja, Romina Maguna, miembro del Comando de Patrullas San Isidro de la Policía Bonaerense y a otros cuatro familiares, incluida su propia cuñada, Gisella Vanesa Maguna, su suegra y un bebé con nueve meses de gestación que tenía fecha para nacer hoy mismo. También hirió gravemente a otros tres familiares de su pareja, entre ellas una niña de 12 años, lo que le aseguró una calificación de tentativa de homicidio.
El desenlace es por lo menos sorprendente: al menos hasta el mes pasado, Loscalzo, con domicilio en la zona de Martín Coronado, se mostraba junto a Maguna y el resto de sus presuntas víctimas en fiestas familiares. Junto a él estaban quienes serían los hijos de la pareja.Loscalzo, por su parte, estaba asediado por deudas, de acuerdo a información del Banco Central. Había conformado una SRL en junio de 2011 junto a una mujer porteña; la firma estaba dedicada a la vigilancia privada, un rubro en el cual Loscalzo había trabajado en 2005 en una importante empresa. Sus registros de empleo revelan puestos en compañías de limpieza y también previamente en Metrovías, en 2007.
Sin embargo, hoy adeuda más de 200 mil pesos a entidades bancarias y enfrentó dos juicios por cobro ejecutivo en el fuero comercial de San Martín, uno librado por una empresa de préstamos y otro por una cooperativa de crédito para casas.
El estupor por la noticia da paso lentamente a algunas reflexiones en voz alta de sus vecinos; algunos dicen que la pareja tenía una relación normal, pero otros aseguran que tenía un vínculo muy tormentoso con su mujer. Testimonios recogidos por la Bonaerense hablan de un cuadro de violencia constante.
Diego, hermano de Romina Maguna, relató cómo fueron los hechos: "Estaba mi hermana en la habitación con su pareja. A él le agarró la loca, empezaron a discutir y le pegó cuatro disparos en el pecho a ella; cuando bajó la escalera le pegó siete tiros a mi otro hermano. A una amiga de la familia le pegó tres tiros, le rompió el fémur. Después se fue al barrio Luna y mató a mi hermano, y le disparó a mi cuñado y le pegó a la hija de mi cuñado".
La noticia es el tema del día y provocó que cientos de personas se pusieran rastrearan el perfil de Diego Loscalzo en redes sociales. "Prefiero andar con locos que con falsos", dice la imagen que eligió de portada para su cuenta de Facebook, en la que se destaca una figura del Guasón, el popular villano de Batman.
La reacción popular es contundente: en su muro se puede leer una catarata de mensajes cargados de ira contra su persona que se replican sin cesar. Ni siquiera la imagen de la virgen María que usa como foto de perfil generó algún sentimiento de compasión. Mientras tanto, la Policía Bonaerense lo busca intensamente, con actuaciones a cargo de la Comisaría 1° de Hurlingham.
La fiscal Paula Hondeville, a cargo de la UFI N°10 especializada en violencia de género de Morón, es la encargada de investigar el caso.
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