Como una metáfora del mal año que tuvo Santa Cruz, el clima y la falta de obras hicieron estragos el último día del año en la capital del kirchnerismo. Mientras la ciudad estaba inundada y las familias buscaban cobijo, la gobernadora Alicia Kirchner anunciaba desde las páginas de un diario que avanza un endeudamiento por US$ 350 millones.
Fue sin dudas el peor año político de Alicia Kirchner, que gobierna acorralada por un cronograma de pago de salarios que no llega a cumplir. Los jubilados hicieron una toma del edificio de la Caja de Previsión Social y reclaman un compromiso de pagos con fechas durante el año. Apenas recibieron una tenue promesa.
El trámite por endeudamiento, que fue cuestionado por la oposición y que aún está en la Justicia, fue el norte del primer año de gestión de la cuñada de la ex presidenta. En una entrevista con el diario local Tiempo Sur, Alicia Kirchner confirmó que tomará un bono externo por US$ 350 millones para este año, aunque aclaró que la expectativa del empréstito para sus cuatro años de gestión es de $ 10.000 millones.
"Me da miedo decir fechas, porque todo depende de si hay una retracción o no en el mercado; estamos hoy muy condicionados por las relaciones internacionales y tiene que ver con las deudas, el país ha tomado una deuda muy grande", dijo la mandataria. Y anticipó que avanza en un bono nacional para este año.
Más allá de que un diputado del Frente para la Victoria (FPV) apreció la gestión de la gobernadora con un "8", los empleados estatales estarían lejos de darle esa calificación. El 28 de diciembre recién terminaron de cobrar los sueldos de noviembre y aún no hay fecha de pago para diciembre.
Hasta el último día del año la gestión de la hermana de Néstor Kirchner estuvo marcada por marchas y protestas. Se perdieron 90 días de clases en las escuelas por paros y las oficinas estatales, la salud y la Justicia se vieron mermadas por huelgas y protestas constantes.
Al evaluar su gestión, Alicia Kirchner volvió a responsabilizar a su antecesor el peronista Daniel Peralta. Ahora lo cuestionó por el incremento de la planta de personal.
"Entre 2011 y 2015, solamente en nuestra administración pública provincial ingresaron más de 9000 empleados públicos. Esto significa hoy, en números, de $ 250 millones a $ 300 millones", detalló la gobernadora, al referirse a los montos que necesita cada mes para pagar sueldos.
Consultado por las acusaciones, el ex gobernador Peralta relativizó ante LA NACION las cifras de Kirchner: "No sé de dónde sacan los números, pero si se toman cargos docentes por carreras, cursos y grados creados, más los 2500 cooperativistas que pasé a planta, los que se tomaron en hospitales y los puestos que se debieron cubrir tras las jubilaciones, el número es alto, pero para nada los 9000 que dice la gobernadora", dijo.
Peralta, quien ya se lanzó con partido propio fuera del FPV, asegura que lo de Alicia Kirchner "es una excusa para justificar su falta de gestión y su propia nula administración".
La gobernadora, quien fue funcionaria provincial y nacional en los últimos 25 años, asegura que el empleo público como modelo está acabado y se sinceró: "Creo que Santa Cruz tuvo una oportunidad histórica". Reconoció, además, cómo a través de doce años de gobierno hay provincias que prosperaron y mantienen ahorros, "pero Santa Cruz no los tiene".
Alicia Kirchner afirmó que Santa Cruz "vive al día" y no tiene un estado de equilibrio en sus finanzas. "Me da una suerte de rabia", aseguró en la entrevista con el medio local. En ese contexto, agregó que su gobierno no echó gente.
Quizá para sacar la protesta de la calle o desmovilizar a los gremios, en los últimos días del mes la gobernadora anunció una licencia para toda la administración pública durante enero. A través del decreto 2322, anunció las vacaciones. Licencia sí, sueldo no.
Para este año, la gobernadora presentó un presupuesto de $ 37.000 millones con un déficit estimado en $ 6700 millones, $ 5000 millones menos que lo declarado para el año pasado.
350 millones de dólares
La gobernadora de Santa Cruz tiene para este año un déficit de $ 6700 millones en el presupuesto. Por eso gestiona un bono externo por $ 350 millones, a lo que se podría sumar un bono nacional
Fue sin dudas el peor año político de Alicia Kirchner, que gobierna acorralada por un cronograma de pago de salarios que no llega a cumplir. Los jubilados hicieron una toma del edificio de la Caja de Previsión Social y reclaman un compromiso de pagos con fechas durante el año. Apenas recibieron una tenue promesa.
El trámite por endeudamiento, que fue cuestionado por la oposición y que aún está en la Justicia, fue el norte del primer año de gestión de la cuñada de la ex presidenta. En una entrevista con el diario local Tiempo Sur, Alicia Kirchner confirmó que tomará un bono externo por US$ 350 millones para este año, aunque aclaró que la expectativa del empréstito para sus cuatro años de gestión es de $ 10.000 millones.
"Me da miedo decir fechas, porque todo depende de si hay una retracción o no en el mercado; estamos hoy muy condicionados por las relaciones internacionales y tiene que ver con las deudas, el país ha tomado una deuda muy grande", dijo la mandataria. Y anticipó que avanza en un bono nacional para este año.
Más allá de que un diputado del Frente para la Victoria (FPV) apreció la gestión de la gobernadora con un "8", los empleados estatales estarían lejos de darle esa calificación. El 28 de diciembre recién terminaron de cobrar los sueldos de noviembre y aún no hay fecha de pago para diciembre.
Hasta el último día del año la gestión de la hermana de Néstor Kirchner estuvo marcada por marchas y protestas. Se perdieron 90 días de clases en las escuelas por paros y las oficinas estatales, la salud y la Justicia se vieron mermadas por huelgas y protestas constantes.
Al evaluar su gestión, Alicia Kirchner volvió a responsabilizar a su antecesor el peronista Daniel Peralta. Ahora lo cuestionó por el incremento de la planta de personal.
"Entre 2011 y 2015, solamente en nuestra administración pública provincial ingresaron más de 9000 empleados públicos. Esto significa hoy, en números, de $ 250 millones a $ 300 millones", detalló la gobernadora, al referirse a los montos que necesita cada mes para pagar sueldos.
Consultado por las acusaciones, el ex gobernador Peralta relativizó ante LA NACION las cifras de Kirchner: "No sé de dónde sacan los números, pero si se toman cargos docentes por carreras, cursos y grados creados, más los 2500 cooperativistas que pasé a planta, los que se tomaron en hospitales y los puestos que se debieron cubrir tras las jubilaciones, el número es alto, pero para nada los 9000 que dice la gobernadora", dijo.
Peralta, quien ya se lanzó con partido propio fuera del FPV, asegura que lo de Alicia Kirchner "es una excusa para justificar su falta de gestión y su propia nula administración".
La gobernadora, quien fue funcionaria provincial y nacional en los últimos 25 años, asegura que el empleo público como modelo está acabado y se sinceró: "Creo que Santa Cruz tuvo una oportunidad histórica". Reconoció, además, cómo a través de doce años de gobierno hay provincias que prosperaron y mantienen ahorros, "pero Santa Cruz no los tiene".
Alicia Kirchner afirmó que Santa Cruz "vive al día" y no tiene un estado de equilibrio en sus finanzas. "Me da una suerte de rabia", aseguró en la entrevista con el medio local. En ese contexto, agregó que su gobierno no echó gente.
Quizá para sacar la protesta de la calle o desmovilizar a los gremios, en los últimos días del mes la gobernadora anunció una licencia para toda la administración pública durante enero. A través del decreto 2322, anunció las vacaciones. Licencia sí, sueldo no.
Para este año, la gobernadora presentó un presupuesto de $ 37.000 millones con un déficit estimado en $ 6700 millones, $ 5000 millones menos que lo declarado para el año pasado.
350 millones de dólares
La gobernadora de Santa Cruz tiene para este año un déficit de $ 6700 millones en el presupuesto. Por eso gestiona un bono externo por $ 350 millones, a lo que se podría sumar un bono nacional
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