La Justicia ordenó separar a la madre superiora del convento donde denunciaron torturas a monjas

La decisión la tomó un juez, ante el pedido del fiscal que investiga el caso. La Iglesia todavía no informó si aplicó sanciones ante los supuestos tormentos sufridos por algunas religiosas



La madre superiora del convento de las Carmelitas Descalzas de Nogoyá, en la provincia de Entre Ríos, fue apartada de su cargo en el marco de medidas judiciales en torno a la investigación por presunta privación ilegítima de la libertad denunciada y tormentos por una ex novicia.

La medida fue dispuesta por el juez de Garantías y de Transición, Gustavo Acosta, ante el pedido del fiscal Federico Uriburu, la monja fuera alejada del lugar para garantizar la transparencia de la investigación judicial. Luisa Toledo, quien como religiosa es conocida como madre María Isabel, dejó el convento luego de 25 años, ya que se encontraba al frente de ese establecimiento católico desde 1991.

Ahora el Arzobispo de Paraná, monseñor Juan Alberto Puiggari, resolverá sobre su futuro inmediato pero la decisión judicial indica que Luisa Toledo no puede quedar al frente de ninguna congregación, en razón de las denuncias contra ella por parte de dos ex carmelitas.
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