Con tantos de Vera (2), Benítez y el "Cebolla" Rodríguez, el "Rojo" goleó 4 a 1 al "Pirata", que marcó a través de Márquez. Los de Pellegrino jugarán la final de la Liguilla contra Racing o Estudiantes
A pesar de la cantidad de agua caída en Avellaneda, el campo de juego se mantuvo impecable en el partido que protagonizaron Independiente y Belgrano por la primera semifinal de la Liguilla Prelibertadores. Con las suspicacias que generó la supuesta lesión de Sergio Pezzotta, el encuentro estuvo a cargo de Silvio Trucco.
Ambos comenzaron el pleito con una propuesta prolija. Los de Mauricio Pellegrino apostaron en la individualidad de Diego Vera, la calidad de Cristian Rodríguez y la pegada de Federico Mancuello. En cambio, los de Ricardo Zielinski aprovecharon los incisivos contragolpes para ponerse en ventaja.
Una desafortunada salida de Víctor Cuesta le dio la posibilidad a Emiliano Rigoni de adueñarse de la pelota y encarar hasta la zona de peligro. El chico de Colonia Caroya se sacó de encima a la última línea local y habilitó a Fernando Márquez para que el goleador establezca el 1 a 0. La sorpresa enmudeció al Libertadores de América.
Sobre la media hora una intervención de Martín Benítez mereció concluir en la red. El de Posadas construyó una extraordinaria pared con el ex Estudiantes y tocó suave ante la salida de Juan Carlos Olave. Cuando de las tribunas se empezó a escuchar el grito sagrado, Federico Álvarez desactivó el tanto a 30 centímetros de la línea de meta. Fue la más clara del Diablo.
La justicia se estableció después de un preciso centro de Jorge Ortiz. El Marciano buscó a Viruta y el atacante fusiló al arquero visitante, quien logró desviar el cabezazo. Sin embargo, el rebote le quedó servido a Vera y el 9 le devolvió el alma a los de Longaniza. El envión anímico fue tan intenso que unos instantes después el ex volante de San Lorenzo y Lanús estuvo cerca de revertir el marcador, pero en esa ocasión Olave se lució con una tapada formidable.
A pesar de la cantidad de agua caída en Avellaneda, el campo de juego se mantuvo impecable en el partido que protagonizaron Independiente y Belgrano por la primera semifinal de la Liguilla Prelibertadores. Con las suspicacias que generó la supuesta lesión de Sergio Pezzotta, el encuentro estuvo a cargo de Silvio Trucco.
Ambos comenzaron el pleito con una propuesta prolija. Los de Mauricio Pellegrino apostaron en la individualidad de Diego Vera, la calidad de Cristian Rodríguez y la pegada de Federico Mancuello. En cambio, los de Ricardo Zielinski aprovecharon los incisivos contragolpes para ponerse en ventaja.
Una desafortunada salida de Víctor Cuesta le dio la posibilidad a Emiliano Rigoni de adueñarse de la pelota y encarar hasta la zona de peligro. El chico de Colonia Caroya se sacó de encima a la última línea local y habilitó a Fernando Márquez para que el goleador establezca el 1 a 0. La sorpresa enmudeció al Libertadores de América.
Sobre la media hora una intervención de Martín Benítez mereció concluir en la red. El de Posadas construyó una extraordinaria pared con el ex Estudiantes y tocó suave ante la salida de Juan Carlos Olave. Cuando de las tribunas se empezó a escuchar el grito sagrado, Federico Álvarez desactivó el tanto a 30 centímetros de la línea de meta. Fue la más clara del Diablo.
La justicia se estableció después de un preciso centro de Jorge Ortiz. El Marciano buscó a Viruta y el atacante fusiló al arquero visitante, quien logró desviar el cabezazo. Sin embargo, el rebote le quedó servido a Vera y el 9 le devolvió el alma a los de Longaniza. El envión anímico fue tan intenso que unos instantes después el ex volante de San Lorenzo y Lanús estuvo cerca de revertir el marcador, pero en esa ocasión Olave se lució con una tapada formidable.