La Renovación volvió a ser ratificada por la sociedad misionera y le dio un enorme caudal de votos al candidato presidencial Daniel Scioli, quien se impuso con comodidad en los comicios nacionales y está muy cerca de ganar en primera vuelta en octubre. Con 30 puntos arriba, Misiones fue una de las provincias donde mayor distancia cosechó el gobernador de Buenos Aires sobre su inmediato competidor, el intendente de la ciudad de Buenos Aires.
La distancia misionera es mucho más elevada que el promedio del país, donde Scioli se imponía a la madrugada de hoy por diez puntos, aunque con la provincia de Buenos Aires con escasos datos oficiales.
La diferencia en Misiones también es la más alta de toda la región NEA a favor de Scioli.
Según las tendencias, ya que al cierre de esta edición no se conocían los resultados oficiales, en Misiones, el gobernador y candidato a diputado nacional, Maurice Closs, fue el más votado con más de 320 mil votos, 223 mil más que el segundo, Humberto Schiavoni, que goza del efecto arrastre de Mauricio Macri, el más votado de la oposición.
La decisión de Closs de convertirse en “puntero” de Scioli en las últimas semanas, tuvo un respaldo contundente con una amplia diferencia a favor del presidenciable incluso en ciudades esquivas, como Posadas.
Con estos guarismos, la Renovación metería tres diputados nacionales (Closs, Cristina Brítez y Jorge Franco), mientras que el PRO se garantizaría la presencia de Humberto Schiavoni en el Congreso nacional.
De todos modos, en la Renovación aseguran que los resultados son un piso que se impone superar en las elecciones de octubre, cuando los intendentes jugarán un rol clave al buscar sus reelecciones o los sublemas, ganar las alcaidías. Así, se provocaría un efecto arrastre inverso, desde abajo hacia arriba, lo que podría elevar el porcentaje de votos obtenidos por la coalición entre la Renovación y el Frente para la Victoria.
Si los resultados se repiten en octubre, se repetiría en Misiones una tradición desde que Néstor Kirchner asumió en 2003. Ni en el peor momento el Frente para la Victoria fue derrotado la provincia.
“La gente vota para adelante, su expectativa es para adelante. Y la gran discusión es el Presidente de la República, y hay que salir a seducir al votante y proponerle para adelante. Eso también implica las continuidades de las políticas y la coherencia”, destacó Closs en la primera evaluación que hizo de los resultados, en una conferencia de prensa en Casa de Gobierno, acompañado por Britez, Franco y Daniel Di Stefano, todos candidatos a diputados nacionales.
En la Rosadita los festejos se guardaron hasta octubre, ya que como dijo Closs, “esto es una muestra gratis”.
Sin embargo, los funcionarios del Gabinete, dirigentes, diputados provinciales y nacionales que se acercaron, se abrazaban entusiasmados con los primeros datos que se conocían.
Los que más celebraron fueron los de “Peronistas sin Fronteras”, que desde hace tres años iniciaron un silencioso trabajo militante por la candidatura de Scioli en Misiones. “Hoy con alegría vemos que todo el pueblo misionero entendió que esta es la mejor opción para nuestra provincia y para todos los argentinos, reflejo del trabajo que supimos llevar adelante con compromiso y seriedad”, señalaron sus principales referentes.
Alta participación
Misiones también fue una de las provincias con mayor caudal de votantes, con más del 75 por ciento del padrón y sería una de las provincias que más porcentaje de votos sumó para Scioli. Es uno de los porcentajes más altos de votación en los últimos años.
El día soleado sirvió para que desde temprano se registrara un alto porcentaje de votantes en todas las escuelas.
No hubo en cambio, tanta visibilidad de la movilización partidaria para llevar votantes. Cada elección que pasa, la tradición del “aparato” va quedando en desuso.
Por lejos, Macri sumó más votos que sus candidatos locales. Posadas fue el bastión, pero perdió en varias ciudades, como Oberá y Apóstoles.
También en Eldorado, donde la sociedad con el converso Alex Ziegler no tuvo un impacto mayor en la sociedad en la que supuestamente debería hacerse más fuerte el ex renovador.
De todos modos, el PRO celebra dejar en carrera a Humberto Schiavoni, el ex ministro de Economía de Ramón Puerta, hoy presidente del partido y con mejores chances de entrar al Congreso.
Alfredo, su hermano, aseguró que estaban contentos con un piso de 20 por ciento de Macri en Misiones, al que arriba con los votos de sus aliados radicales y de la Coalición Cívica.
El radicalismo es el partido que peor negocio hizo de sus alianzas. Coqueteó con el PRO y pretendía un “gran frente” que comenzó a negociarse hace dos años, apenas apagado el festejo de las legislativas de 2013. Hizo su propia interna que coronó a Gustavo González como candidato, pero después ofreció su cabeza a cambio de una alianza con el PRO.
Fue el propio González el que tuvo que resistir para no bajarse, lo que terminó por desalentar el acuerdo con el partido de Macri y por último, terminó negociando con Ramón Puerta, una sociedad que ni el más osado quería aceptar.
Terminó demasiado lejos del PRO, se quedó sin candidato a presidente por primera vez desde 1983 y no le alcanzan los votos para soñar con una banca en la Cámara baja. “Nos fue para el or…”, confesó un joven dirigente que en 2013 se había convertido en una de las esperanzas de renovación en la UCR.
Desairado por el PRO, el radicalismo transitará en soledad de cara a octubre y a una distancia sideral de los votos obtenidos por la Renovación, lo que desalienta las esperanzas del joven candidato a gobernador, Gustavo González, quien se tuvo que conformar con una alianza corta con sus socios históricos, que no aportan un caudal de votos significativo.
Era tanta la desolación en el radicalismo, que hasta cerca de las 22, el único dirigente que estaba en la sede partidaria era Hernán Damiani, el más votado en la interna de cuatro listas, pero con casi nulas esperanzas de entrar en la disputa por la cuarta banca.
Desolación. Damiani fue uno de los pocos dirigentes que fue hasta la sede de la UCR.
Desolación. Damiani fue uno de los pocos dirigentes que fue hasta la sede de la UCR.
El presidente con licencia apenas estaba rodeado de un circulo íntimo que compartía las mismas caras largas.
El radicalismo perdió incluso en Posadas, donde en 2013 había obtenido un buen resultado, y estaba cuarenta puntos por debajo de Macri.
En cambio, la Capital, que le había dado la espalda a la Renovación en 2013, ahora le dio una victoria y sumó casi cuarenta puntos para Scioli según los primeros resultados oficiales.
Los radicales que se fueron antes disconformes con las negociaciones con el PRO anoche masticaban su venganza.
Aunque nadie quiso hacer leña del árbol caído, recordaron que habían advertido que la alianza con Macri iba a llevar al partido al desastre.
Ni siquiera después de la huída de De la Rúa en helicóptero el radicalismo dejó de tener candidato a presidente, ya que en 2003 se presentaron Leopoldo Moreau y el fallecido senador misionero Mario Losada.
Ahora, en cambio, Ernesto Sanz entregó el partido a Macri y todavía anoche celebraba “convertirse en una opción” de cara a octubre. Opción que no los incluye, ya que el propio Macri adelantó que si gana, no necesariamente habrá de armar un gobierno de “coalición”.
En definitiva, la UCR misionera queda mucho peor posicionada de lo que estaba en 2013 y perdió la oportunidad de consolidarse como segunda fuerza en la oposición. Los más jóvenes dirigentes esperarán hasta octubre para pasar factura a los veteranos que condujeron las frustradas negociaciones. El ánimo derrotista, durará, sin embargo, bastante más tiempo.
Normalidad
Las elecciones en Misiones transcurrieron con total normalidad, en un día soleado y con escasa movilización partidaria. Desde temprano las escuelas abrieron y la afluencia de votantes fue continua desde los primeros minutos.
Cientos de jóvenes votaron por primera vez y también hubo ejemplos de civismo con personas de más de 75 años, que no están obligados a votar.
Con los resultados en Misiones, la Renovación se consolida como el espacio político central y le da un buen plafón a Hugo Passalacqua como candidato a gobernador para suceder a Closs.
Asimismo, los votos de Misiones, el noveno distrito electoral, generan un peso específico en la consideración nacional si se ratifica el triunfo de Scioli en octubre.
En la oposición el espacio más votado fue el de Macri, siguiendo la tendencia nacional, pero la idea del “cambio” quedó muy lejos de la profundización que ofrecen Scioli y la Renovación.
Sergio Massa quedó tercero, con apenas una decena de puntos, pero sorprendentemente, por encima de su figura local, el ex gobernador Ramón Puerta, quien sueña con regresar al Congreso.
El puertismo pasó de una proyección que lo colocaba “como segunda fuerza” a un silencio abrumador. Puerta no habló con nadie y sus colaboradores contaban los escasos votos con la esperanza de modificar una tendencia irreversible.
Llamativamente, las bocas de urnas contratadas por Puerta lo colocaban segundo y el apoderado del frente integrado por Unión Popular y el CET, Claudio Roa, salió a decir que “en octubre vamos a pelear por la gobernación” en Misiones.
Aunque los números que se conocían contradecían el “un clima de tranquilidad y confianza” en el bunker de Puerta, los voceros del frente con Camioneros, aseguraban que la elección fue muy buena y que “nuestro frente es la segunda fuerza en la provincia, la gente sabe que somos la verdadera oposición y lo demostró en las urnas”.
“Estamos en condiciones de decir que hicimos una gran elección, somos la segunda fuerza”, señaló uno de los operadores de Puerta. El ex gobernador hablará hoy en una rueda de prensa.
De todos modos, Puerta sigue en carrera para octubre, ya llegaba al 8,9 por ciento de los votos. En cambio, según la tendencia a la medianoche, quedaban afuera el partido Socialista, con 1,22 por ciento, el partido del Obrero, 1,11 por ciento, el Instrumento Electoral por la Unidad Popular, con 0,74 y el Movimiento Independiente Justicia y Dignidad que cosechaba 0,52.
Con los resultados parciales, Misiones se posiciona bien de cara a octubre para colocar a dos representantes en el Parlasur, ya que Julia Perié va por la lista nacional y la boleta del Frente para la Victoria junto a la Renovación, con Cecilia Britto como candidata, alcanzaba el 50,65 por ciento de los votos en Misiones, muy por encima de Cambiemos, que postula a Enrique De Arrechea, con 14,51 por ciento y la Unión Cívica Radical con 10,61por ciento.
“Esto ha sido una conquista que es de todos los argentinos; que es de todos los misioneros. El pueblo es inteligente. Va a saber resolver lo que tenga que resolver”, expresó Britto.
La distancia misionera es mucho más elevada que el promedio del país, donde Scioli se imponía a la madrugada de hoy por diez puntos, aunque con la provincia de Buenos Aires con escasos datos oficiales.
La diferencia en Misiones también es la más alta de toda la región NEA a favor de Scioli.
Según las tendencias, ya que al cierre de esta edición no se conocían los resultados oficiales, en Misiones, el gobernador y candidato a diputado nacional, Maurice Closs, fue el más votado con más de 320 mil votos, 223 mil más que el segundo, Humberto Schiavoni, que goza del efecto arrastre de Mauricio Macri, el más votado de la oposición.
La decisión de Closs de convertirse en “puntero” de Scioli en las últimas semanas, tuvo un respaldo contundente con una amplia diferencia a favor del presidenciable incluso en ciudades esquivas, como Posadas.
Con estos guarismos, la Renovación metería tres diputados nacionales (Closs, Cristina Brítez y Jorge Franco), mientras que el PRO se garantizaría la presencia de Humberto Schiavoni en el Congreso nacional.
De todos modos, en la Renovación aseguran que los resultados son un piso que se impone superar en las elecciones de octubre, cuando los intendentes jugarán un rol clave al buscar sus reelecciones o los sublemas, ganar las alcaidías. Así, se provocaría un efecto arrastre inverso, desde abajo hacia arriba, lo que podría elevar el porcentaje de votos obtenidos por la coalición entre la Renovación y el Frente para la Victoria.
Si los resultados se repiten en octubre, se repetiría en Misiones una tradición desde que Néstor Kirchner asumió en 2003. Ni en el peor momento el Frente para la Victoria fue derrotado la provincia.
“La gente vota para adelante, su expectativa es para adelante. Y la gran discusión es el Presidente de la República, y hay que salir a seducir al votante y proponerle para adelante. Eso también implica las continuidades de las políticas y la coherencia”, destacó Closs en la primera evaluación que hizo de los resultados, en una conferencia de prensa en Casa de Gobierno, acompañado por Britez, Franco y Daniel Di Stefano, todos candidatos a diputados nacionales.
En la Rosadita los festejos se guardaron hasta octubre, ya que como dijo Closs, “esto es una muestra gratis”.
Sin embargo, los funcionarios del Gabinete, dirigentes, diputados provinciales y nacionales que se acercaron, se abrazaban entusiasmados con los primeros datos que se conocían.
Los que más celebraron fueron los de “Peronistas sin Fronteras”, que desde hace tres años iniciaron un silencioso trabajo militante por la candidatura de Scioli en Misiones. “Hoy con alegría vemos que todo el pueblo misionero entendió que esta es la mejor opción para nuestra provincia y para todos los argentinos, reflejo del trabajo que supimos llevar adelante con compromiso y seriedad”, señalaron sus principales referentes.
Alta participación
Misiones también fue una de las provincias con mayor caudal de votantes, con más del 75 por ciento del padrón y sería una de las provincias que más porcentaje de votos sumó para Scioli. Es uno de los porcentajes más altos de votación en los últimos años.
El día soleado sirvió para que desde temprano se registrara un alto porcentaje de votantes en todas las escuelas.
No hubo en cambio, tanta visibilidad de la movilización partidaria para llevar votantes. Cada elección que pasa, la tradición del “aparato” va quedando en desuso.
Por lejos, Macri sumó más votos que sus candidatos locales. Posadas fue el bastión, pero perdió en varias ciudades, como Oberá y Apóstoles.
También en Eldorado, donde la sociedad con el converso Alex Ziegler no tuvo un impacto mayor en la sociedad en la que supuestamente debería hacerse más fuerte el ex renovador.
De todos modos, el PRO celebra dejar en carrera a Humberto Schiavoni, el ex ministro de Economía de Ramón Puerta, hoy presidente del partido y con mejores chances de entrar al Congreso.
Alfredo, su hermano, aseguró que estaban contentos con un piso de 20 por ciento de Macri en Misiones, al que arriba con los votos de sus aliados radicales y de la Coalición Cívica.
El radicalismo es el partido que peor negocio hizo de sus alianzas. Coqueteó con el PRO y pretendía un “gran frente” que comenzó a negociarse hace dos años, apenas apagado el festejo de las legislativas de 2013. Hizo su propia interna que coronó a Gustavo González como candidato, pero después ofreció su cabeza a cambio de una alianza con el PRO.
Fue el propio González el que tuvo que resistir para no bajarse, lo que terminó por desalentar el acuerdo con el partido de Macri y por último, terminó negociando con Ramón Puerta, una sociedad que ni el más osado quería aceptar.
Terminó demasiado lejos del PRO, se quedó sin candidato a presidente por primera vez desde 1983 y no le alcanzan los votos para soñar con una banca en la Cámara baja. “Nos fue para el or…”, confesó un joven dirigente que en 2013 se había convertido en una de las esperanzas de renovación en la UCR.
Desairado por el PRO, el radicalismo transitará en soledad de cara a octubre y a una distancia sideral de los votos obtenidos por la Renovación, lo que desalienta las esperanzas del joven candidato a gobernador, Gustavo González, quien se tuvo que conformar con una alianza corta con sus socios históricos, que no aportan un caudal de votos significativo.
Era tanta la desolación en el radicalismo, que hasta cerca de las 22, el único dirigente que estaba en la sede partidaria era Hernán Damiani, el más votado en la interna de cuatro listas, pero con casi nulas esperanzas de entrar en la disputa por la cuarta banca.
Desolación. Damiani fue uno de los pocos dirigentes que fue hasta la sede de la UCR.
Desolación. Damiani fue uno de los pocos dirigentes que fue hasta la sede de la UCR.
El presidente con licencia apenas estaba rodeado de un circulo íntimo que compartía las mismas caras largas.
El radicalismo perdió incluso en Posadas, donde en 2013 había obtenido un buen resultado, y estaba cuarenta puntos por debajo de Macri.
En cambio, la Capital, que le había dado la espalda a la Renovación en 2013, ahora le dio una victoria y sumó casi cuarenta puntos para Scioli según los primeros resultados oficiales.
Los radicales que se fueron antes disconformes con las negociaciones con el PRO anoche masticaban su venganza.
Aunque nadie quiso hacer leña del árbol caído, recordaron que habían advertido que la alianza con Macri iba a llevar al partido al desastre.
Ni siquiera después de la huída de De la Rúa en helicóptero el radicalismo dejó de tener candidato a presidente, ya que en 2003 se presentaron Leopoldo Moreau y el fallecido senador misionero Mario Losada.
Ahora, en cambio, Ernesto Sanz entregó el partido a Macri y todavía anoche celebraba “convertirse en una opción” de cara a octubre. Opción que no los incluye, ya que el propio Macri adelantó que si gana, no necesariamente habrá de armar un gobierno de “coalición”.
En definitiva, la UCR misionera queda mucho peor posicionada de lo que estaba en 2013 y perdió la oportunidad de consolidarse como segunda fuerza en la oposición. Los más jóvenes dirigentes esperarán hasta octubre para pasar factura a los veteranos que condujeron las frustradas negociaciones. El ánimo derrotista, durará, sin embargo, bastante más tiempo.
Normalidad
Las elecciones en Misiones transcurrieron con total normalidad, en un día soleado y con escasa movilización partidaria. Desde temprano las escuelas abrieron y la afluencia de votantes fue continua desde los primeros minutos.
Cientos de jóvenes votaron por primera vez y también hubo ejemplos de civismo con personas de más de 75 años, que no están obligados a votar.
Con los resultados en Misiones, la Renovación se consolida como el espacio político central y le da un buen plafón a Hugo Passalacqua como candidato a gobernador para suceder a Closs.
Asimismo, los votos de Misiones, el noveno distrito electoral, generan un peso específico en la consideración nacional si se ratifica el triunfo de Scioli en octubre.
En la oposición el espacio más votado fue el de Macri, siguiendo la tendencia nacional, pero la idea del “cambio” quedó muy lejos de la profundización que ofrecen Scioli y la Renovación.
Sergio Massa quedó tercero, con apenas una decena de puntos, pero sorprendentemente, por encima de su figura local, el ex gobernador Ramón Puerta, quien sueña con regresar al Congreso.
El puertismo pasó de una proyección que lo colocaba “como segunda fuerza” a un silencio abrumador. Puerta no habló con nadie y sus colaboradores contaban los escasos votos con la esperanza de modificar una tendencia irreversible.
Llamativamente, las bocas de urnas contratadas por Puerta lo colocaban segundo y el apoderado del frente integrado por Unión Popular y el CET, Claudio Roa, salió a decir que “en octubre vamos a pelear por la gobernación” en Misiones.
Aunque los números que se conocían contradecían el “un clima de tranquilidad y confianza” en el bunker de Puerta, los voceros del frente con Camioneros, aseguraban que la elección fue muy buena y que “nuestro frente es la segunda fuerza en la provincia, la gente sabe que somos la verdadera oposición y lo demostró en las urnas”.
“Estamos en condiciones de decir que hicimos una gran elección, somos la segunda fuerza”, señaló uno de los operadores de Puerta. El ex gobernador hablará hoy en una rueda de prensa.
De todos modos, Puerta sigue en carrera para octubre, ya llegaba al 8,9 por ciento de los votos. En cambio, según la tendencia a la medianoche, quedaban afuera el partido Socialista, con 1,22 por ciento, el partido del Obrero, 1,11 por ciento, el Instrumento Electoral por la Unidad Popular, con 0,74 y el Movimiento Independiente Justicia y Dignidad que cosechaba 0,52.
Con los resultados parciales, Misiones se posiciona bien de cara a octubre para colocar a dos representantes en el Parlasur, ya que Julia Perié va por la lista nacional y la boleta del Frente para la Victoria junto a la Renovación, con Cecilia Britto como candidata, alcanzaba el 50,65 por ciento de los votos en Misiones, muy por encima de Cambiemos, que postula a Enrique De Arrechea, con 14,51 por ciento y la Unión Cívica Radical con 10,61por ciento.
“Esto ha sido una conquista que es de todos los argentinos; que es de todos los misioneros. El pueblo es inteligente. Va a saber resolver lo que tenga que resolver”, expresó Britto.