En principio, según palabras del propio Jan Koum, el cofundador de WhatsApp y hasta el momento CEO, “esto es lo que va a cambiar para ti y para los usuarios: nada.” De hecho, según el comunicado oficial de la aplicación, seguirán trabajando de manera independiente. No obstante, podemos esperar que con el tiempo lleguen cambios, tanto para WhatsApp como para la propia Facebook.
¿Qué hay de la publicidad?
Y no hay ninguna duda de que la principal preocupación de los usuarios de WhatsApp está relacionada con la publicidad de la aplicación. Y es que, lo que diferenciaba a la app de todas las demás es que ésta ha afirmado desde el principio que no tienen ninguna intención de introducir publicidad. De hecho, ese es el motivo que les ha hecho pasar a cobrar anualmente una cuota a los usuarios, algo con lo que ya contaban, pero que no habían aplicado con casi ningún usuario hasta el año pasado.
¿Qué va a ser ahora de WhatsApp? ¿Pasará a tener publicidad? Según las palabras de la compañía, podemos esperar que no vaya a tener publicidad. Y lo más probable es que por mucho que cambien las cosas, todo continúe siendo así. Durante mucho tiempo, la clave de WhatsApp ha sido la ausencia de publicidad, y añadir esta a la aplicación dejaría muy claro que Facebook ha inclumplido lo prometido, algo que no les beneficia en ningún caso, y más cuando las consecuencias de la compra de WhatsApp pueden ser muy positivas.
Facebook Messenger tiene las horas contadas
Lo que parece más claro es que el futuro de Facebook Messenger es muy negro. La aplicación de mensajería de la compañía de Palo Alto ha ganado muchos adeptos en los últimos años, sobre todo en Estados Unidos. Sin embargo, no es rival para WhatsApp en lo que se refiere a cuota de usuarios mundial. Si Facebook ha comprado WhatsApp es para adoptarla como su aplicación de mensajería instantánea, y en esas circunstancias, Facebook Messenger ya no tiene ningún sentido. No sería nada raro que la app acabara siendo integrada en la propia WhatsApp.
¿Qué cambios veremos en WhatsApp?
Ahora bien, Facebook no se ha gastado 16.000 millones de dólares, más otros 3.000 millones en acciones restringidas, para que después no tengan nada que decir sobre WhatsApp. Es más que obvio que por mucho que se diga de que todo seguirá igual, habrá cambios en la aplicación de mensajería. Aunque, eso sí, es fácil que todo vaya a mejorar. A partir de ahora, WhatsApp contará con el apoyo de un equipo de ingenieros mucho mayor. Tengamos en cuenta que la aplicación de mensajes contaba con una plantilla de unos 30 empleados. Por su parte, no solo van a contar con ingenieros de alto nivel, sino también con diseñadores, algo que será muy bueno para el futuro de WhatsApp. Solo pensar en la aplicación para Android, que ha cambiado muy poco en los últimos años, y en la de iOS, que hasta el último rediseño había sido prácticamente igual, nos permite entender los grandes cambios que podremos ver ahora en WhatsApp.
Principalmente, veremos dos modificaciones importantes, con diferentes consecuencias. La primera de ellas es que habrá muchas más actualizaciones y con muchos mayores cambios. Con un equipo de mayor tamaño trabajando en la aplicación, y con muchos más recursos, es muy sencillo que se vayan aplicando mejoras en WhatsApp en mucho menos. No vamos a esperar meses para ver solo una actualización que muestre algún pequeño cambio, sino que ahora las actualizaciones serán mucho más amplias. No podemos descartar tampoco la inclusión de características como las llamadas de voz o las videollamadas.
La otra gran modificación probablemente tendrá que ver con la integración de la aplicación en la red social, y viceversa. ¿Podremos hablar en WhatsApp simplemente entrando a Facebook.com? ¿Tendremos contacto con nuestros amigos de la red social en la aplicación de WhatsApp? Son cosas que no sabemos, pero que se aplicarán de alguna manera, y es cuestión de tiempo que suceda. Esperemos, eso sí, que Facebook no decida cambiar radicalmente WhatsApp y hacer que esta pierda la esencia.